Mensaje
por IvanOrtega » Jue Feb 04, 2010 06:40
Nubes negras se avecinan, presagio de tempestades,
advertidas en tus ojos cuando los míos evades.
¿Por qué tan impredecible cuando ayer brillaba el sol
en las niñas de tus ojos con refulgente candor?
Mi muy querida y admirada amiga Mujer de Espuma
Pura magia y sentimiento se desborda de tu pluma, pasado nublando el presente, experiencias que fueron vistiendo el alma. Sabes algo mi adorada poeta, no importa de que color se vista tu alma siempre lucirá pura y maravillosa.
Cuando lo leí me dije: este poema será para mí. Pero me hice dos preguntas y descubrí que no es así: ¿Ogro? Estoy feo pero no tanto ¿Ángel? No tengo alas tan sólo unas patas de gallo en la mirada jajaja.
¡Cómo que nubes negras! Venga para acá, salgamos del Bar para que veas como a fuerza de suspiros, de esos que tus hermosas poesías me arrancan, disipo éste cielo que aflige a tu alma, para que vuelva a salir la bella luna que siempre nos aguarda.
Vamos mi querida compañera que ya llego el jinete desde la lejana montaña para decirte: allá, del otro lado del horizonte, hay un paraíso que nos aguarda; de sus árboles cuelgan versos, y en las aguas de sus ríos corren sueños limpios y nuevos, vamos mi querida musa, por un momento dejemos el Bar, vayamos a sentir la hierba en nuestros pies. Ah! pero eso sí mañana regresamos a nuestro hogar de exiliados a mirar, con unos caballitos trotándonos en la garganta, aquellas fotos que en el paraíso nos hemos de tomar.
Recibe el más fuerte de los abrazos de este mariachi, amigo, ave de cuello desplumado, doctor, galeote, aprendiz, admirador, lanchero, lector y mexicano que te quiere con el alma
Peter Ivánovich Pielroja Pan