NACE EL SENTIMIENTO
Nace el sentimiento, que se abre como rosa
y se va desvaneciendo como suspiro en el viento
impregnando su perfume hasta en el pensamiento,
va brotando como nube en alas de mariposa.
Nace el sentimiento como la hoja de un árbol
tan fresca en la mañana, siempre mirando al cielo
como ese río que corre veloz por la montaña,
como caudal de emociones anidadas en el pecho.
Ramillete de sueños que despiertan con el alba,
manantial de ilusiones que adormecen la memoria,
sentimientos silenciosos que no necesitan palabras,
son susurros que llevo escondidos en mi alma.
Nace el sentimiento arrullado por las caricias,
esas que se quedan en el corazón cautivas,
esperando acurrucadas para poder surgir
como brisa misteriosa, o como canto de Dios
para convertirse. . . en versos.
Esmeralda