Un cuarto de muerte inconmensurable
rodea un anhelo de vida incierta,
que extrae las gotas del envidiable
conocimiento de puerta no abierta.
El sentir de aquel dolor insondable
será llama que Prometeo vierta
nuevamente, de forma insobornable,
en la humanidad que recién despierta.
Deucalión, fabricará nuevamente
a Pandora aquella caja de males,
que quedará incrustada en nuestra mente
para augurios de conceptos fatales
que germinaran en la espera mansa
que no quede encerrada la esperanza.
Es uno de mis primero intentos de hacer sonetos.. les pido que si encuentran algun error en la métrica me lo indiquen para poder ir aprendiendo y cumpliendo con el rigor que este tipo de poesía requiere...