si punzas con tu espada
la noche y la alborada
y encuentras el camino
del porfiado asesino
culpable e inconfeso.
¡La honra por un beso!
Demuestran el reproche
sutil de mi vigilia:
indultos, la familia,
los llantos en la noche,
las penas, el derroche
de mi ternura preso.
¡La honra por un beso!
Tu culpa y mi razón
reciben la medalla,
y pierden la batalla
la fe y mi corazón.
Me hundí en la tentación,
y en pago al embeleso:
¡La honra por un beso!
Blanca Amelia Santos
11/May/09