cuando la dulce utopía,
como sueños cada día
nos invade el corazón.
Entonemos la canción
cual cantos de ruiseñores,
alma llena de esplendores
cual bello canto a la vida,
al amigo no se olvida
ni al amor de los amores.
Roberto Santamaría
Ni al amor de los amores,
que fue Poeta en esencia,
Maestro de amor y ciencia
Creador de los colores,
a Él rindamos honores.
Amigo de sus amigos
nos legó sus mansos trigos,
e innumerables lecciones
que servirán de padrones
para ser de Él, testigos.
Queta
Para ser de Él testigos
hay que tener convicción,
seguirlo con decisión
nos salvará de castigos.
Así seremos como higos,
abundantes en su higuera,
no caerán a la acera
hasta alcanzar madurez,
desechar la insensatez,
es lo que Él más quisiera.
Queta
Los de esta generación
cual los de las venideras,
sólo persiguen quimeras
se esconden en un rincón.
Siempre la misma canción
la ausencia de la empatía,
cultivar la egolatría
es la meta perseguida,
el ser humano se olvida
del amor que les unía.
Roberto Santamaría
Del amor que les unía,
siempre deben acordarse,
dejarse de tonterías,
y empezar a reencontrarse;
primero con uno mismo,
y luego con el amigo,
caminar al mismo ritmo,
por la senda de la unión,
ese será el objetivo,
no habrá separación.
Karlox
No habría separación
si seguimos el consejo,
dejar de fruncir el cejo
actuando con comprensión.
No existe mejor opción
para evitar la rencilla
que buscarse una sombrilla,
cuando el sol nos pegue fuerte
para tener mejor suerte
y no vivir en capilla.
Queta
Y no vivir en capilla
representa disciplina,
la rutina es la asesina
como cada cajetilla
que nos pone zancadilla.
El amor no es como el vicio,
es un delicado oficio
para todo aquel mortal
que lo tiene en pedestal,
aún con gran sacrificio.
Queta
Aún con gran sacrificio
vivir la vida nos cuesta
porque la vida no es fiesta,
pero tampoco un oficio.
Hay que vivir sin perjuicio
propio ni tampoco ajeno,
hay que ser el nazareno
arrastrando nuestra cruz
y así tan solo la luz
brillará de frente a pleno.
Luis