Acudo a ti...
Recurro a tu vida sin consentimiento,
y de tu amor me sacio con todas las ganas,
con tu manto cubres mi rostro
y secas todas las lágrimas.
Es de tu cielo de donde proviene la paz,
de ese corazón ánico e incomparable
yo me robo las palpitaciones para sobrevivir,
y de tus ojos busco la alegría para sonreir.
Con capricho desecho mares de llanto
porque es de tu alma de donde proviene mi calma,
con los ojos cerrados siempre te veo,
estando sola me encuentro contigo,
porque es en ti en quien estoy pensando.
Con mis manos rodeo tu rostro
para acariciar tus labios preciosos
que me dan las palabras
y el consuelo a mis heridas,
y con tus tiernos brazos
sostienes mi alma,yo me siento protegida.
LLorando estoy invocando tu nombre,
deseando en las noches sentir tu llegada,
donde son tus pasos los que me levantan
a tan añorada esperanza.
Contemplo en tu mundo todas mis razones
donde tú me guías con contemplaciones
dándole a mi cuerpo diversas emociones,
enseñandole a vivir aún en las peores condiciones.
Con dolor y respiro puedo yo sentir
que tu amor me alista un mundo completo,
puedes verme sonreir aun siempre sufriendo
porque tu corazón late en mi con todo su silencio.
Acudo a ti mi adorado amor,
tú enseñas valor mi Dios infinito,
dichosa me haces cuando con tu calor me abrigo,
Acudo a ti porque siempre estás conmigo.
Recurro a tu vida sin consentimiento,
y de tu amor me sacio con todas las ganas,
con tu manto cubres mi rostro
y secas todas las lágrimas.
Es de tu cielo de donde proviene la paz,
de ese corazón ánico e incomparable
yo me robo las palpitaciones para sobrevivir,
y de tus ojos busco la alegría para sonreir.
Con capricho desecho mares de llanto
porque es de tu alma de donde proviene mi calma,
con los ojos cerrados siempre te veo,
estando sola me encuentro contigo,
porque es en ti en quien estoy pensando.
Con mis manos rodeo tu rostro
para acariciar tus labios preciosos
que me dan las palabras
y el consuelo a mis heridas,
y con tus tiernos brazos
sostienes mi alma,yo me siento protegida.
LLorando estoy invocando tu nombre,
deseando en las noches sentir tu llegada,
donde son tus pasos los que me levantan
a tan añorada esperanza.
Contemplo en tu mundo todas mis razones
donde tú me guías con contemplaciones
dándole a mi cuerpo diversas emociones,
enseñandole a vivir aún en las peores condiciones.
Con dolor y respiro puedo yo sentir
que tu amor me alista un mundo completo,
puedes verme sonreir aun siempre sufriendo
porque tu corazón late en mi con todo su silencio.
Acudo a ti mi adorado amor,
tú enseñas valor mi Dios infinito,
dichosa me haces cuando con tu calor me abrigo,
Acudo a ti porque siempre estás conmigo.
