HOMENAJE AL SEÑOR DE LOS MILAGROS
Con tus manos morenas de esclavo,
pintaste a Cristo hermano.
para ser cauce que gobierne
la miseria que nos embarga
transformándola en emociones
que nos hacen más solidarios.
Cristo consolador de los que sufre
la agonía de tus clavos
ninguna pena es grande
delante de tu calvario.
¡Bendita sea mi pena que redime mi alma!.
Fieles a tu amor van en procesión
sanos y lisiados,
pudientes e indigentes
justos y equivocados,
hincados de rodillas
algunos pies descalzos,
purgando una penitencia
pidiéndote un milagro.
Es la religiosidad e idiosincrasia
de un pueblo que en su corazón
con fervor te proclama.
Tú nos recuerdas cuanto
Dios nos sigue amando,
por eso multitudes moradas
te van cantando :
¡Señor de Pachacamilla,!
¡Cristo Moreno!,
¡Señor de los Milagros!
Maricruz Díaz
10.10.11