
¿Deben haber razones para que de mi boca
escape aquella frase de enamorados?
¿Debe haber sueños locos, soñados ahora
y realizados, posiblemente, en un pasado?
Mis razones son tus ojos, tu amor al hombre,
tus abrazos, tu calidez, tu hermoso nombre.
Mi razón es la demencia ante un simple roce;
el desesperado deseo de que eterno se torne.
Las palabras que con sabiduría dibujas,
las miradas ÚNICAS que atesoro con amor,
tu DIVINA que me asfixia de sublime paz,
es la presencia de tu alma que llena mi corazón.
La fuente de vida que late dentro de mí,
la ausencia que abruma mis sentidos,
aquel de alma gigante, que no cabe dentro de sí,
cuyo último fulgor de vivir, resuena en oídos perdidos
como un golpe seco, como un sonido hueco,
en la frase que retumba en mi ser interno:
se escucha 'TENGO MIEDO', y su infinito eco."