que toca lo tibio de mi corazón...
jornadas que se convierten en astío
y otros en indiferencia...
tal vez en deseos...
Por que en la inmensidad
de una estrella, en su belleza,
existe la soledad...
La obscuridad
de un abrazo, de un sentir
que no es permitido...
que no es dado
y solo imaginado...
Relativa felicidad
desprendidas de la utopía,
de llegar a alcanzarla
y no solo acariciarla...
vivir, impregnarse de sus sensaciones...
Atesorar la felicidad
que brinda
un corazón amado,
un palpitar gemelo,
un solo aroma
que se aferra a las ropas
haciendome ladrón
de tu escencia...