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solo vivir al máximo,siempre en el mejor modo posible,
se debe vivir de verdad,permitiendo al amor de entrar en
nuestros días,dando al corazón el derecho de amar y ser
amado,sin total control,sin tantas reglas o reclamos.
No se puede siempre controlar a todos y a todo,porque
la vida es de verdad muy bella,que las personas decidan
de ser felices o no,perseguir la perfecta felicidad es
una perdida de tiempo,porque ella en verdad no existe.
Que cosa es la felicidad si no,el permitir y el dar a nuestros
seres queridos,a todos los amigos,la oportunidad de estarnos
cerca,sin decidir el modo en que nos tienen que querer,
simplemente recibiendo ese amor y recambiando a la vez,esa es
la verdadera felicidad.
No se puede cambiar todas las cosas malas o buenas de la vida,
se puede solo aceptar el amor en todas sus formas y colores,
disfrutando cada instante de la belleza que nos rodea y del
privilegio de tener siempre cerca,personas que amamos y
que nos aman.
Si se tiene la convicción de que nuestra vida es bella como es,
ahora sera así,con todos los obstáculos,con todas sus esfumaduras,
con todos los errores.
Porque en realidad,no existen verdaderos errores,porque cada acción
cometida,sea buena o sea mala,son simplemente lecciones de vida,
experiencias para nuestros días.
Porque la vida no es mas que un continuo aprendizaje,que aveces pueden ser
bellos,aveces pueden ser menos,pero en verdad lo mas importante es
que solo la suma de todas ellas,es lo que nos vuelve las personas
que somos o sino aquellas que deseamos ser.
Para vivir de verdad se necesitan también las feas y malas experiencias,
para poder crecer,para poder aprender,el camino tiene sus obstáculos,
pero vale de verdad la pena,porque nada mas bello que superar las
barreras y salir adelante,cada vez con mas fuerza y vehemencia,
la vida es bella,basta nada mas el coraje,la fe y el modo en que
se desee verla.
Autor
Inspiraciones
de
Meylin Montey Mauro