
No Quise Decirte Nada
No quise decirte nada y te amé en silencio en esa tarde...
Tus cabellos acrecentaban la sombra en la extensión del ocaso.
Tú voz fue lo que paralizo mi vida, robandome el aire,
marcando la claridad del deseo encendido entre tus brazos.
Me acerqué a tú penumbra formando parte de ella.
Robando tus pensamientos en la soltura de tus suspiros...
Mi amor se fue encendiendo junto con la primera estrella,
dejando en esa tarde, todo aquello que vivió dentro mío...
Te amé en silencio pero tú no sabías de mi amor
y sufría en intensión de aquel beso que no pudo ser...
Guardando inocentemente en mi pecho aquel dolor,
parecido a un dulce sueño seguido del padecer...
Mi desesperación llego al punto de ser mi fatal compañera,
intimidando con decirte todo lo que yo sentía.
Pero hubo algo que no sabía de la primavera,
que al mirarte, también florecia toda mi vida.
Te amé en silencio y nunca te dije nada,
porque el destino es cruel y puede arruinar el momento.
Callado, entre las sombras y perdido en tú mirada,
cautivo por un amor que sufro en mi silencio...
Tus cabellos acrecentaban la sombra en la extensión del ocaso.
Tú voz fue lo que paralizo mi vida, robandome el aire,
marcando la claridad del deseo encendido entre tus brazos.
Me acerqué a tú penumbra formando parte de ella.
Robando tus pensamientos en la soltura de tus suspiros...
Mi amor se fue encendiendo junto con la primera estrella,
dejando en esa tarde, todo aquello que vivió dentro mío...
Te amé en silencio pero tú no sabías de mi amor
y sufría en intensión de aquel beso que no pudo ser...
Guardando inocentemente en mi pecho aquel dolor,
parecido a un dulce sueño seguido del padecer...
Mi desesperación llego al punto de ser mi fatal compañera,
intimidando con decirte todo lo que yo sentía.
Pero hubo algo que no sabía de la primavera,
que al mirarte, también florecia toda mi vida.
Te amé en silencio y nunca te dije nada,
porque el destino es cruel y puede arruinar el momento.
Callado, entre las sombras y perdido en tú mirada,
cautivo por un amor que sufro en mi silencio...
PENUMBRO