por dama que me vetó su amor.
Cartas sin sentido escribiendo,
para disipar de mi alma el dolor.
Si no supiste ganar su cariño,
no lloriquees ni te laceres,
y no te portes como un niño.
Así es como aman las mujeres.
Corre el velo que te hace ver tan mal,
pues otros matices tiene el amor,
baja a esa mujer de su pedestal
y busca a la dama que te de otro calor.