se te pega al pecho y alecciona
mientras caen de tu alma
las gotas perennes de tu melancolía...
te abraza, te consuela, te dicta las lecciones aprendidas,
es la experiencia de las nuevas heridas,
que ella, solicita te muestra,
no es vacía ni melancólica,
es toda vida y primavera,
un oasis donde refrescas el alma triste de amor
harta de penas,
ah!! mi soledad,
siempre te invoco
para sanar los vestigios
de mi corazón roto,
ante cada nueva eventualidad,
no eres música triste ni oscura pena,
un silencio tranquilo
donde curar el corazón
que sufre y llora por las heridas,
crueles de la realidad...
mi soledad es "el imperio de mi conciencia"
solo en ella, los amores prohibidos pueden habitar.