Dulces fueron los recuerdos
que llenaste con tu presencia,
apaciguaste las tinieblas
que rodeaban mi razón.
Aliviaste el dolor del viento
y las lágrimas de mi tristeza,
infundiste vida con tu pureza
y refugio le diste a este corazón.
que llenaste con tu presencia,
apaciguaste las tinieblas
que rodeaban mi razón.
Aliviaste el dolor del viento
y las lágrimas de mi tristeza,
infundiste vida con tu pureza
y refugio le diste a este corazón.