Mujer de Espuma escribió:Cada vez que encuentro un poema tuyo, mi querido Poeta, primero me acomodo, pongo la mente en blanco y empiezo a caminar por tus veredas de Poesía, donde sé hallaré abundante talento y sentimiento, como este que hoy nos traes, con tu característico toque de nostalgia dulce, donde los sueños, abrazan tu pluma.
Amor, ¿cuántas veces más… besando soledad,
hasta encontrarme ahogado en la húmeda caricia de tus labios?
¿Cuántos latidos solitarios, cuanta sangre errante me ha de recorrer
hasta verme preso, encadenado al suave filo de tus manos?
Siguen mis ojos buscándose en lo infinito de los tuyos.
Hurgando voy entre el oleaje de estrellas
que veo en el mar abierto de tus ojos negros,
negros ojos que alumbran mis noches, que deslumbran mi vida.
Amor, ¿cuántas veces más…?
¿Cómo puede Maestro, volcar tanto en sus preciosos poemas?
Intenso y cálido, melancólico y profundo, sutil y enamorado, así sentí este hermoso poema, mi Doc querido, en este inagotable tintero de un alma, con infinito caudal para amar.
Con toda mi admiración, mi humilde huella a tu profunda inspiración, mi amigo del alma, en un enorme abrazo de tu amiga por siempre...
Queta
Mi querida y admirada Mujer de Espuma
¿Maestro? Si acaso un torpe aprendiz de las grandiosas plumas como la tuya, mi bella Espumita de mar, de un mar de hermosas y dulces aguas. Un honor tus inmerecidas palabras a mis intentos de poemas.
Recibe un fuerte abrazo de éste amigo que te quire tanto!
Ivan