Lloras, sí
porque fui el causante
de tu herida
porque te hice la vida
una injusticia
lloras, sí
porque tuve la osadía
de verme a escondidas con otra
porque no merecías las caricias
que te ofrecía, y sí, lloras
lloras, porque fui yo quien te hirió.
Lágrimas de cristal
vine aquí a consolar tu alma
porque se que ella sangra
al no tener la cura para amar
lágrimas de cristal
porque fui tan vil de creerme
el más gentil pero me disfrazaba
de lo que nunca sentí
pero sin ti me he de morir
y menos volver a vivir.
Sé que te hice daño, lo admito
que jamás quise hacerlo
mi corazón tenía dueño
y fuiste quien la vida castigó.
Sé que no merezco tu perdón
solo busco tu regreso
amarnos de nuevo como fueron
aquellos tiempos
solo tú podrás sanar mi alma
por haber herido la tuya.
Lágrimas de cristal
vine aquí a consolar tu alma
porque se que ella sangra
al no tener la cura para amar
lágrimas de cristal
porque fui tan vil de creerme
el más gentil pero me disfrazaba
de lo que nunca sentí
pero sin ti me he de morir
y menos volver a vivir.
©José López