La Ingravidez de los Sentimientos
Publicado: Lun May 25, 2009 04:15
Perdona si mi necesidad inhibe tu vuelo
pero debo decir las gotas de biografías
que yacen en estas manos llenas de vacío,
son rastrojos de una herida y un amor,
son una verdad cargada de espinas
que causaron las rosas de las mentiras;
floté en la ingravidez de los sentimientos,
en el apremio por el amanecer de la ilusión
comulgué con las avalanchas de hipocresías,
nublé la verdad que conocía la razón
y quedé llorando a corazón abierto.
Podía ver directo al motivo de su afecto
pero preferí esparcir nubes sobre mi frente
y a mi rostro contuso nunca reflejar,
perfeccioné el disimulo al perder la calma
y me culpé por las heridas que me causaba,
me bastaba con saber que lo hallaría al despertar
aun si al abrazarle nunca hubo un latido para mi.
Sabía del error como sabe el niño lo que está prohibido,
consciente del castigo me cegué con claridad
y por las calles de la soledad de su compañía
llore las lágrimas de las hadas que nunca llegan al cuento,
porque el impostor era yo y no él.
pero debo decir las gotas de biografías
que yacen en estas manos llenas de vacío,
son rastrojos de una herida y un amor,
son una verdad cargada de espinas
que causaron las rosas de las mentiras;
floté en la ingravidez de los sentimientos,
en el apremio por el amanecer de la ilusión
comulgué con las avalanchas de hipocresías,
nublé la verdad que conocía la razón
y quedé llorando a corazón abierto.
Podía ver directo al motivo de su afecto
pero preferí esparcir nubes sobre mi frente
y a mi rostro contuso nunca reflejar,
perfeccioné el disimulo al perder la calma
y me culpé por las heridas que me causaba,
me bastaba con saber que lo hallaría al despertar
aun si al abrazarle nunca hubo un latido para mi.
Sabía del error como sabe el niño lo que está prohibido,
consciente del castigo me cegué con claridad
y por las calles de la soledad de su compañía
llore las lágrimas de las hadas que nunca llegan al cuento,
porque el impostor era yo y no él.