como el sonoro aullido de una fiera
mis oídos silentes en espera.
rogando el día que puedas regresar.
Con la llegada de ese fugaz día
tu silueta en belleza deslumbrante
de esa tu luz, cual un rayo brillante
mi ardor por ti como fuego prendía
Quiero tus manos , quiero de tu boca
tus rojos labios me llaman para eso
robar en ellos, un soñado beso
así se apagaré esta pasión loca
Deslizaré mis manos por tu piel
entregando el ardor de mi pasión
a tu tierno y sincero corazón
de este tu amante enamorado fiel
diera la luz que a veces me ilumina
para ver reflejada en tu pupila
al fulgor de esa belleza escondida
fuente de amor en agua cristalina
De este amor terrenal en su medida
árbol celeste que une la distancia
sándalo con la múltiple fragancia
de tierra, y cielo, y sangre, y muerte y vida.
SACARIAS