
Respiro con aliento la desenvoltura de la brisa
miro la luz que se abre a su paso entre las sombras,
surge la mañana fría y lenta al ritmo del reloj
así el deseo de un nuevo día con mi faena a cuesta,
regio este corazón clasificando y triturando lo que le gusta
como el aire en el aire excavando un cauce, una grieta
por donde se deslize este hondo sentír que me entristece
que se reposa haciendo en mí un vacio muy agitado...
¡Recuerdos! Sí eso queda despúes de un amor así...
Ese día que rozastes tus labios con los mios
avanzabas y encendias mi cuerpo como una estopa,
tejiendo, urdiendo mis pasiones en mi terreno
y seguias apresurando mis pálpitos acorralandome en tí,
así, sí con tu respirar sobre mí dominandome toda
como dos almas en zozobra atadas por este amor
¡Quietos, quietos! Espera, te decía yo desesperada...
Tiembla en el aire la verguenza en mi cara
nada hay tan claro como mis impulsos
de querer volar pero empujada hacia arriba
sobrepasar el tiempo y volar entre las nubes,
me bastaria con ladear mis cabellos y abrir mis ojos
aspirar el aroma de la claridad desnudando a la oscuridad...
¿Ves? Solo se pierde lo que no se ama haga lo que haga
hasta con mil palabras que escríba nunca lo entenderas.
Yanisbeth
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