Al amanecer parí lágrimas,
lágrimas de dolor, de dolor
de MUJER , mis lágrimas
caían raudamente ante la impotencia
de la traición, la traición trapera . . .
rastrera . . .
Parí lágrimas por ser MUJER en este día
tan especial, al preguntarme el porqué
de este día . . .
Solo por luchar contra la traición,
la impotencia, el amor, nuestros hijos,
el pan de cada día , la dignidad . . .
Cuando somos MUJER desde
que se creó el mundo , desde
ese preciso instante . . .
luchamos por sentirnos DIGNAS
e iguales al HOMBRE, ese
que somete, ese HOMBRE
que se llama PODER . . .
Sabiendo que lo parió una mujer,
sin ella no existe, no puede proyectarse,
amar, procrear, desear
gozar de la vida a pleno.
Y parí lágrimas por ese HOMBRE
que hace sucumbir los sueños,
la dignidad de nuestro género. . .
Sigo pariendo lágrimas
sin saber cuando cesarán . . .
quizás hoy . . o quizás nunca . . .
Tan solo se que amanecí
pariendo lágrimas como una niña
que le han pinchado su globo
mas hermoso que tenía en sus manos . . .
al sentir la miseria de la traición
a mi condición de MUJER.
Ay . . . mis lágrimas arden
en mi rostro también
por aquellas mujeres que traicionan
por un hombre . . . EL PODER.
Hoy mis lágrimas son
por todas las MUJERES DEL MUNDO
con DIGNIDAD DE MUJER.
Grisel Vidales.
8/03/08
