
QUE EL AMOR HAGA SU NIDO
Te metiste a mis entrañas,
asaltaste al corazón,
lo ganaste,
con la chispa de tus ojos
y el brillar de tu razón.
Me ganaste con tus labios,
con su beso y su pasión.
Con tu cálida mirada
le das luz a mi mañana,
acompañas mis rutinas,
con tu risa tan temprana.
Tus amores,
en mi sangre forman olas
y en la noches abres cielos
colocándome en tus brazos,
donde hay sueños
y rumor de caracolas.
Cerremos toda grieta,
y dejemos
que el amor haga su nido,
que el milagro de tu beso
alebreste mi piel quieta,
que se quede a mi lado,
en los poros resumido,
e intentemos, con ardor,
que no sople en nuestro altar
el viento horrible del olvido.
Leonardo Sáenz Baez