NO RENUNCIARE.
Publicado: Jue Mar 17, 2011 14:07
NO RENUNCIARE
(A TI GUATEMALA)
Jamás renunciaré a tu bellezas supremas,
ni al encantador Ocaso del cenit prendido,
amaré la plateada luna en noches serenas,
besando el oleaje añil del mar adormecido.
No dejaré de pensar en tu frondosos montes,
extasiado por el aroma de tu floresta silvestre,
también escucharé al atardecer los sinsontes,
sobre fértiles valles de esmeralda campestre.
No renunciaré a la pureza de tus vientos,
ni al manantial que de tu vientre desliza,
son tus relieves tan plácidos aposentos,
grata contemplación que el alma sublimiza.
¿Cómo renunciar a tu agreste campiña?,
o a esas impresionantes alturas de montaña,
majestuosas cómo el vuelo de aves de rapiña
que bajo límpido cielo viaja siempre ermitaña.
No podría vivir sin la candencia de tus mares,
ni sin la cautivante caricia de seductoras olas,
playas que tanto inspiran Versos y Cantares,
entre penumbras de noche y amantes a solas.
Llevaré inmersa en el alma tu sacra natura,
sublimes encantos de magnificada topografía,
eres ese paradisiaco Edén que eterno perdura.
Lo eres todo... ¡Eres La Guatemala mía!
Autor: Víctor A. Arana,
(VICTOR SANTA ROSA),
Marzo 16 del 2011.
(A TI GUATEMALA)
Jamás renunciaré a tu bellezas supremas,
ni al encantador Ocaso del cenit prendido,
amaré la plateada luna en noches serenas,
besando el oleaje añil del mar adormecido.
No dejaré de pensar en tu frondosos montes,
extasiado por el aroma de tu floresta silvestre,
también escucharé al atardecer los sinsontes,
sobre fértiles valles de esmeralda campestre.
No renunciaré a la pureza de tus vientos,
ni al manantial que de tu vientre desliza,
son tus relieves tan plácidos aposentos,
grata contemplación que el alma sublimiza.
¿Cómo renunciar a tu agreste campiña?,
o a esas impresionantes alturas de montaña,
majestuosas cómo el vuelo de aves de rapiña
que bajo límpido cielo viaja siempre ermitaña.
No podría vivir sin la candencia de tus mares,
ni sin la cautivante caricia de seductoras olas,
playas que tanto inspiran Versos y Cantares,
entre penumbras de noche y amantes a solas.
Llevaré inmersa en el alma tu sacra natura,
sublimes encantos de magnificada topografía,
eres ese paradisiaco Edén que eterno perdura.
Lo eres todo... ¡Eres La Guatemala mía!
Autor: Víctor A. Arana,
(VICTOR SANTA ROSA),
Marzo 16 del 2011.