Es ese latir que conquista
¡te amarra!
¡te revive!
¡siempre te atrapa!
Es un fluir imparable
¡te succiona!
¡te invita al poder!
¡te hace locuras!
Es ese ¡tuntun! Del corazón
Eres la condena del amor
Cualquiera pierde la razón
Así provocas delirio como
También poderío…¡éxtasis!
Eres esa gran sazón.
José Luis López
24/3/2011