Se llamará hombre
Publicado: Vie May 02, 2008 00:16
SE LLAMARÁ HOMBRE
No tiene nombre el humano, tiene apodos,
en unas partes, trás la sangre...le llaman asesino,
en otras, por intrascendente, simplemente cobarde,
y dios desde lo alto, nos mira avergonzado,
pues somos todo lo opuesto, de lo que soñó al crearnos.
Mundo....querido vocablo, que día a día manchamos,
con el prefijo in se ve mejor reflejado,
la tierra se va muriendo, de metralla embarazada,
pariendo hijos inútiles que son ciegos al nacer.
Cuando veo la tristeza en la carita de un niño,
de un niño que ya no podrá, alegremente correr,
cuando descubro que un amigo murió ayer en la guerra,
que una fría medalla consuela, el llanto de su mujer.
Me pregunto hasta cuando, adonde iremos, carijo,
si la bondad es unicornio presta a desaparecer,
si la paz, tras la vitrina, es un trofeo de antaño,
si envenenamos lo bueno para criar la mala fe.
Es hora ya de que amigos, no sean solo seis letras,
que nuestras manos construyan y dejen de destruir,
de nada nos sirven rezos ni pretendidas iglesias,
si hoy no decimos: alto y empezamos a comprender,
QUE EL HUMANO SE LLAMARÁ HOMBRE,
CUANDO APRENDA A QUERER.
No tiene nombre el humano, tiene apodos,
en unas partes, trás la sangre...le llaman asesino,
en otras, por intrascendente, simplemente cobarde,
y dios desde lo alto, nos mira avergonzado,
pues somos todo lo opuesto, de lo que soñó al crearnos.
Mundo....querido vocablo, que día a día manchamos,
con el prefijo in se ve mejor reflejado,
la tierra se va muriendo, de metralla embarazada,
pariendo hijos inútiles que son ciegos al nacer.
Cuando veo la tristeza en la carita de un niño,
de un niño que ya no podrá, alegremente correr,
cuando descubro que un amigo murió ayer en la guerra,
que una fría medalla consuela, el llanto de su mujer.
Me pregunto hasta cuando, adonde iremos, carijo,
si la bondad es unicornio presta a desaparecer,
si la paz, tras la vitrina, es un trofeo de antaño,
si envenenamos lo bueno para criar la mala fe.
Es hora ya de que amigos, no sean solo seis letras,
que nuestras manos construyan y dejen de destruir,
de nada nos sirven rezos ni pretendidas iglesias,
si hoy no decimos: alto y empezamos a comprender,
QUE EL HUMANO SE LLAMARÁ HOMBRE,
CUANDO APRENDA A QUERER.