una extraña cosa
que su espléndido mirar revestía
de una luz dudosa.
¿Un pesar sería
la razón curiosa
que por íntegro su tez primorosa
de palor cubría?
Cuanto más veía
a mi bien donosa
en mi espíritu la daga que hendía
¡era más filosa!
Hacia mí venía
pero tan calmosa
que de súbito supuse ominosa
¡esa causa impía!
La abracé; sentía
su actitud medrosa
que oprimiéndola le dije: eres mía,
¡mi mujer preciosa!
Y su voz tenía
una paz grandiosa
cuando díjome: te quiero, tu rosa
soy, tu blanco día;
pero oye y fía
porque soy dichosa:
estoy grávida… ¡Será tu alegría
una beba hermosa!
La besé; volvía
a su faz de diosa
el espléndido mirar que en mi esposa
¡más que el sol fulgía!
Blanco día = la vida
La seguilira es una forma poética presentada por Ramiro Padilla Guerrero (creador de la isopeya), el 09 de julio de 2011.
Los versos de la seguilira son cuatro en el orden siguiente:
dos hexasílabos, un endecasílabo y un hexasílabo; pero las rimas de la seguilira son consonantes, cruzadas y/o abrazadas, como en el cuarteto–lira.
En consecuencia, puede seguir los siguientes esquemas: 6a–6b–11A–6b o bien 6a–6b–11B–6a.
Pero si se trata de un poema de varias seguiliras, las rimas cruzadas y las abrazadas deben alternarse, comenzando por cualquiera de las dos.
El poema debe tener 5 o más estrofas.
La seguilira que aquí presento es birrima y consta de hexasílabos con acentos predominantes en 3ª y 5ª sílabas y el endecasílabo es Pradiano, o sea con acentos predominantes en 3ª, 7ª y 10ª sílabas, donde la 3ª recae siempre en palabra esdrújula.
Teniendo en cuenta que esta semana es la última del presente año que estaré por aquí te dejo mis sinceras salutaciones de Navidad y Año Nuevo.