ROMANCE DE LOS DOS FANTASMAS de maru aparicio carreño
Publicado: Sab May 28, 2011 02:42
ROMANCE DE LOS DOS FANTASMAS
El viento gime y ruge, envolviendo en su abrazo,
los muros devastados de un antiguo palacio,
mientras sus altas torres, majestuosas, sombrías,
enhiestas aun se alzan y al viento desafían,
Vestigios del pasado, testigos de otras horas,
callejón solitario, por donde nadie ronda,
que misterioso encanto su silencio remora,
que leyenda mas triste, que nos cuentan sus sombras.
Nadie pasa de noche por la oscura calleja,
ni los perros se atreven cuando las doce suenan;
solo dos formas blancas, de fantasmas alados,
acuden a una cita, desde el tiempo pasado.
Fué, en época remota, que un gentil caballero,
cantaba su tristeza al pie del torreón,
estaba enamorado de una joven muy bella,
pero como era pobre, le negaban su amor.
Y venía de noche, cuando las doce daban,
a cantar a su amada, su encendida pasión,
ya que los padres de ella, la habían encerrado,
en la torre mas alta lindante al callejón.
La bella Celimena, que constante le amaba,
y que siempre acudía a escuchar la canción,
aquella noche aciaga, para reconfortarle,
envuelta en un pañuelo, dejo caer una flor
Cuando iba el amante a coger el regalo.
amparado en la sombra, un acero le hirió,
y mientras que caía con la rosa en la mano,
su sangre, en el pañuelo, dibujaba otra flor.
La pobre Celimena, transida de dolor,
se arrojó sobre el cuerpo desde su torreón,
sus manos se juntaron en un nudo de amor,
mientras que sus miradas se decían adiós.
Y en las noches calladas, oscuras, silenciosas,
ese fantasma etéreo, viene a buscar la rosa,
y Celimena espera, ella misma una sombra,
en la ruinosa torre, constante y amorosa.
Las doce suenan tristes, en la Iglesia cercana,
y ellos, sin falta, acuden a la cita macabra,
¡como en la noche aquella, que separó sus vida
ya que su amor eterno...... ¡¡VIVE UNIDO EN SUS ALMAS!!
MARU APARICIO
El viento gime y ruge, envolviendo en su abrazo,
los muros devastados de un antiguo palacio,
mientras sus altas torres, majestuosas, sombrías,
enhiestas aun se alzan y al viento desafían,
Vestigios del pasado, testigos de otras horas,
callejón solitario, por donde nadie ronda,
que misterioso encanto su silencio remora,
que leyenda mas triste, que nos cuentan sus sombras.
Nadie pasa de noche por la oscura calleja,
ni los perros se atreven cuando las doce suenan;
solo dos formas blancas, de fantasmas alados,
acuden a una cita, desde el tiempo pasado.
Fué, en época remota, que un gentil caballero,
cantaba su tristeza al pie del torreón,
estaba enamorado de una joven muy bella,
pero como era pobre, le negaban su amor.
Y venía de noche, cuando las doce daban,
a cantar a su amada, su encendida pasión,
ya que los padres de ella, la habían encerrado,
en la torre mas alta lindante al callejón.
La bella Celimena, que constante le amaba,
y que siempre acudía a escuchar la canción,
aquella noche aciaga, para reconfortarle,
envuelta en un pañuelo, dejo caer una flor
Cuando iba el amante a coger el regalo.
amparado en la sombra, un acero le hirió,
y mientras que caía con la rosa en la mano,
su sangre, en el pañuelo, dibujaba otra flor.
La pobre Celimena, transida de dolor,
se arrojó sobre el cuerpo desde su torreón,
sus manos se juntaron en un nudo de amor,
mientras que sus miradas se decían adiós.
Y en las noches calladas, oscuras, silenciosas,
ese fantasma etéreo, viene a buscar la rosa,
y Celimena espera, ella misma una sombra,
en la ruinosa torre, constante y amorosa.
Las doce suenan tristes, en la Iglesia cercana,
y ellos, sin falta, acuden a la cita macabra,
¡como en la noche aquella, que separó sus vida
ya que su amor eterno...... ¡¡VIVE UNIDO EN SUS ALMAS!!
MARU APARICIO