La visita de la muerte (primera parte)
Publicado: Lun Abr 28, 2008 21:31
...un estremecimiento recorre mi espalda; gotas de sudor perlan mi frente ¿qué me está pasando?
Siento la expectación anticipatoria de algo no muy bueno que pasará, quisiera definir la causa de mi miedo... y no lo puedo hacer... es tarde y las estrellas brillan intensamente; es una noche oscura con vientos helados que parecieran congelar todo aquello que se encuentra a mi alrededor, lo único que escucho de a ratos es el segundero del reloj que se encuentra en la pared, ni un sonido, tan solo silencio...
Comienzo a escuchar que tocan a la puerta muy quedo... casi imperceptiblemente ¿quién será a estas horas? No deseo abrir... me asomo por la ventana y la calle se encuentra desierta, tan solo hay una silueta en mi puerta no distingo ni su rostro ni la forma de su cuerpo, decido que lo mejor es no abrir la puerta a estas horas...
-"¿Quién?"-digo desde atrás de la puerta con voz temblorosa, no hay respuesta...
Después parezco escuchar un susurro ¿en latín? la voz que escucho me provoca escalofríos, me armo de valor y vuelvo a preguntar: -"¿Quién es?"-silencio nuevamente y después de varios segundos el mismo murmullo en otro idioma, varias conjeturas atraviesan veloces por mi mente, ninguna agradable por supuesto...
Hay algo en esa voz que me eriza la piel y me dan ganas de gritar más ningún sonido acude a mi garganta, escucho el teléfono a lo lejos... la noticia me agobia al otro lado del teléfono...
Salgo al jardín de la casa, un rayo de luna ilumina de manera muy tenue los árboles que se mecen suavemente al ritmo del viento... sin embargo sigo sintiendo lo mismo: una sensación extraña como de un mal presentimiento; camino un poco hacia la fuente para ver si de esta manera puedo despejar mis ideas; parece que observo una sombra debajo de un árbol ¿un perro?
Siento un estremecimiento en mi nuca y volteó por un instante, se me hiela la sangre al verla fijamente a los ojos (si es que a eso se le pueden llamar ojos): son únicamente unos orificios en algo que alguna vez fue un resto carcomido por algo, tal vez un animal... trae puesto un reboso de color parduzco bastante maltratado por el paso del tiempo, durante unos instantes nos observamos, y yo quiero salir corriendo aunque mis piernas no me responden...
Cierro los ojos para no verla y cuando los abro ya no se encuentra ahí, ni la sombra que observé junto al árbol tampoco ¿sería una jugarreta de mi mente?
Cuando se tiene miedo la imaginación tiende a jugarnos muy malas pasadas...
Decido volver al interior de la casa; ya que me parece lo más seguro y menos aterrador, al entrar cierro la puerta que da al jardín con sus dos cerrojos y la atranco con una silla, me dirijo a mi recamara no sé si pueda dormir, pero vale la pena intentarlo...
Escucho el aullido del perro del vecino, lo que me faltaba, ahora que me quiero dormir el maldito perro va a comenzar a aullar, de cualquier manera decido meterme a la cama; estoy en la indecisión de apagar o no la luz de la lamparilla de noche cuando vuelvo a escuchar el mismo murmullo de hace rato...
Ahora lo distingo más claramente, efectivamente es latín!!! No me había equivocado, pero ¿porqué escucho el mismo murmullo que oí hace rato detrás de la puerta? Parece que las palabras que escuché son "rigor mortis", de momento recuerdo un chacal con cuerpo de humano que vi en una exposición sobre Egipto... pero porque...
Continuara
Siento la expectación anticipatoria de algo no muy bueno que pasará, quisiera definir la causa de mi miedo... y no lo puedo hacer... es tarde y las estrellas brillan intensamente; es una noche oscura con vientos helados que parecieran congelar todo aquello que se encuentra a mi alrededor, lo único que escucho de a ratos es el segundero del reloj que se encuentra en la pared, ni un sonido, tan solo silencio...
Comienzo a escuchar que tocan a la puerta muy quedo... casi imperceptiblemente ¿quién será a estas horas? No deseo abrir... me asomo por la ventana y la calle se encuentra desierta, tan solo hay una silueta en mi puerta no distingo ni su rostro ni la forma de su cuerpo, decido que lo mejor es no abrir la puerta a estas horas...
-"¿Quién?"-digo desde atrás de la puerta con voz temblorosa, no hay respuesta...
Después parezco escuchar un susurro ¿en latín? la voz que escucho me provoca escalofríos, me armo de valor y vuelvo a preguntar: -"¿Quién es?"-silencio nuevamente y después de varios segundos el mismo murmullo en otro idioma, varias conjeturas atraviesan veloces por mi mente, ninguna agradable por supuesto...
Hay algo en esa voz que me eriza la piel y me dan ganas de gritar más ningún sonido acude a mi garganta, escucho el teléfono a lo lejos... la noticia me agobia al otro lado del teléfono...
Salgo al jardín de la casa, un rayo de luna ilumina de manera muy tenue los árboles que se mecen suavemente al ritmo del viento... sin embargo sigo sintiendo lo mismo: una sensación extraña como de un mal presentimiento; camino un poco hacia la fuente para ver si de esta manera puedo despejar mis ideas; parece que observo una sombra debajo de un árbol ¿un perro?
Siento un estremecimiento en mi nuca y volteó por un instante, se me hiela la sangre al verla fijamente a los ojos (si es que a eso se le pueden llamar ojos): son únicamente unos orificios en algo que alguna vez fue un resto carcomido por algo, tal vez un animal... trae puesto un reboso de color parduzco bastante maltratado por el paso del tiempo, durante unos instantes nos observamos, y yo quiero salir corriendo aunque mis piernas no me responden...
Cierro los ojos para no verla y cuando los abro ya no se encuentra ahí, ni la sombra que observé junto al árbol tampoco ¿sería una jugarreta de mi mente?
Cuando se tiene miedo la imaginación tiende a jugarnos muy malas pasadas...
Decido volver al interior de la casa; ya que me parece lo más seguro y menos aterrador, al entrar cierro la puerta que da al jardín con sus dos cerrojos y la atranco con una silla, me dirijo a mi recamara no sé si pueda dormir, pero vale la pena intentarlo...
Escucho el aullido del perro del vecino, lo que me faltaba, ahora que me quiero dormir el maldito perro va a comenzar a aullar, de cualquier manera decido meterme a la cama; estoy en la indecisión de apagar o no la luz de la lamparilla de noche cuando vuelvo a escuchar el mismo murmullo de hace rato...
Ahora lo distingo más claramente, efectivamente es latín!!! No me había equivocado, pero ¿porqué escucho el mismo murmullo que oí hace rato detrás de la puerta? Parece que las palabras que escuché son "rigor mortis", de momento recuerdo un chacal con cuerpo de humano que vi en una exposición sobre Egipto... pero porque...
Continuara