CARTA A LOS REYES MAGOS
Publicado: Lun Dic 08, 2008 11:08
Queridos Reyes Magos:
Quisiera pediros, en nombre de todos aquellos que caminamos por la senda de la poesía, un solo deseo para estas fiestas que se avecinan.
Se trata de un deseo muy especial. Se trata, más bien, de un sueño por compartir; de un sueño, que entre todos tendríamos que hacer realidad.
A lo largo de mi vida, desde que era niño, os he escrito cantidad de cartas, en las que os pedía toda una serie de favores y otros tantos bienes materiales.
Recuerdo perfectamente el día en que me dejasteis, junto a la ventana, aquel balón de cuero y los guantes de portero; después, vinieron, entre otras cosas, la primera bicicleta, el tractor de pedales, la pizarra electrónica
y la camiseta del fútbol club Barcelona …
Eran tiempos de infancia; era la hora y el instante preciso para ser feliz y para dejar constancia de que alguna vez fuimos niños …(niños felices)
Siempre he apreciado la magia de todas aquellas tradiciones que arrastran consigo estelas de sueño e ilusión.
La ilusión, sobretodo durante los años de la infancia, es totalmente fundamental. Todos los niños del mundo deberían poder llegar a la madurez albergando en su alma momentos de imborrable felicidad; aunque, por desgracia, todos sabemos que eso no es así.
Lugares hay en el mundo, en donde, la etapa infantil de millones de niños, se desarrolla inmersa entre abismos
de pobreza total, violencia y abominables confrontaciones.
Lugares hay en el mundo, en donde los espejos de la realidad reflejan espasmos de constante dolor;
en donde la ilusión se asemeja a una serpiente de fuego, hacia confines de sombra e incertidumbre.
Hay niños que ríen, y otros muchos que lloran …
Hay niños que rechazan la merienda de las cinco, porque han comido demasiado durante el almuerzo …
Otros, simplemente, carecen , de una rebanada de pan durante días …
Lugares hay en el mundo, en donde alguien, de vez en cuando, se sienta cómodamente frente al teclado,
y escribe cartas como ésta. Cartas que, las nuevas tecnologías, permiten llegar rápidamente a casi todos los rincones del mundo; y , sin embargo, esas mismas tecnologías, no son capaces de acabar de una vez por todas,
con el hambre y la confrontación.
Queridos Reyes Magos:
Durante siglos os habéis guiado por la luz de una misma estrella. Quizá ha llegado la hora de cambiar el rumbo,
Y de buscar otras sendas que os conduzcan hacia otros confines, hacia otros pesebres ocultos y olvidados,
En donde miles de niños pasan frío, hambre … y nadie se acuerda de ellos.
El niño de aquel primer pesebre ya se hizo mayor. Creció, y anduvo por los caminos dando consuelo y esperanza a los desvalidos … y permitió que los niños se acercaran a Él.
En verdad os lo digo: ¡ aquel niño cumplió con creces su cometido !
No hay mayor deseo, pues, que éste.
Buscad en el cielo esa nueva luz que os conduzca hacia otros caminos.
Nosotros, como siempre, dejaremos los zapatos vacíos junto a la ventana entreabierta; un plato con nueces
Y un vaso de leche.
Si por la mañana todo sigue igual, entenderé que mi deseo se ha cumplido.
Un deseo que no es más que un primer paso. Soy consciente de que hay mucho por hacer;
Muchos caminos por andar; muchas manos por tender …
Quisiera pediros, en nombre de todos aquellos que caminamos por la senda de la poesía, un solo deseo para estas fiestas que se avecinan.
Se trata de un deseo muy especial. Se trata, más bien, de un sueño por compartir; de un sueño, que entre todos tendríamos que hacer realidad.
A lo largo de mi vida, desde que era niño, os he escrito cantidad de cartas, en las que os pedía toda una serie de favores y otros tantos bienes materiales.
Recuerdo perfectamente el día en que me dejasteis, junto a la ventana, aquel balón de cuero y los guantes de portero; después, vinieron, entre otras cosas, la primera bicicleta, el tractor de pedales, la pizarra electrónica
y la camiseta del fútbol club Barcelona …
Eran tiempos de infancia; era la hora y el instante preciso para ser feliz y para dejar constancia de que alguna vez fuimos niños …(niños felices)
Siempre he apreciado la magia de todas aquellas tradiciones que arrastran consigo estelas de sueño e ilusión.
La ilusión, sobretodo durante los años de la infancia, es totalmente fundamental. Todos los niños del mundo deberían poder llegar a la madurez albergando en su alma momentos de imborrable felicidad; aunque, por desgracia, todos sabemos que eso no es así.
Lugares hay en el mundo, en donde, la etapa infantil de millones de niños, se desarrolla inmersa entre abismos
de pobreza total, violencia y abominables confrontaciones.
Lugares hay en el mundo, en donde los espejos de la realidad reflejan espasmos de constante dolor;
en donde la ilusión se asemeja a una serpiente de fuego, hacia confines de sombra e incertidumbre.
Hay niños que ríen, y otros muchos que lloran …
Hay niños que rechazan la merienda de las cinco, porque han comido demasiado durante el almuerzo …
Otros, simplemente, carecen , de una rebanada de pan durante días …
Lugares hay en el mundo, en donde alguien, de vez en cuando, se sienta cómodamente frente al teclado,
y escribe cartas como ésta. Cartas que, las nuevas tecnologías, permiten llegar rápidamente a casi todos los rincones del mundo; y , sin embargo, esas mismas tecnologías, no son capaces de acabar de una vez por todas,
con el hambre y la confrontación.
Queridos Reyes Magos:
Durante siglos os habéis guiado por la luz de una misma estrella. Quizá ha llegado la hora de cambiar el rumbo,
Y de buscar otras sendas que os conduzcan hacia otros confines, hacia otros pesebres ocultos y olvidados,
En donde miles de niños pasan frío, hambre … y nadie se acuerda de ellos.
El niño de aquel primer pesebre ya se hizo mayor. Creció, y anduvo por los caminos dando consuelo y esperanza a los desvalidos … y permitió que los niños se acercaran a Él.
En verdad os lo digo: ¡ aquel niño cumplió con creces su cometido !
No hay mayor deseo, pues, que éste.
Buscad en el cielo esa nueva luz que os conduzca hacia otros caminos.
Nosotros, como siempre, dejaremos los zapatos vacíos junto a la ventana entreabierta; un plato con nueces
Y un vaso de leche.
Si por la mañana todo sigue igual, entenderé que mi deseo se ha cumplido.
Un deseo que no es más que un primer paso. Soy consciente de que hay mucho por hacer;
Muchos caminos por andar; muchas manos por tender …