así pido fundirte en mi anatomía,
que acallemos lentamente la agonía;
y me vuelvas loca de tanto amor,
y me estremezcas con tanto ardor.
Así... así...
así intérnate en mi fuente,
que muere en vaivén intermitente;
y me sometes a tu elixir untuoso,
y me arrasas con tu besar celoso.

