Lo que yo no sueño
Publicado: Sab Ago 11, 2012 10:15
El amanecer hastía las brechas de mi corazón,
majaderías de un sastre sin telar,
es el abono que preludia el fértil
jardín del bienestar.
No soy de hielo, tengo secuelas del invierno,
parece que me invaden los deseos,
y veo el camino de baldosas amarillas
en tu perfecta imperfección,
y pienso que si no encuentro tus ojos,
seré ciego, si no alcanzo tu sonrisa,
desgraciado seré mi amor
si tu corazón no veo.
Paladio firme de tu estirpe esgrimes,
mentoladas dudas que me escollan
el intento de acabar ileso,
pero mi cota de mallas son tus serenos besos,
y mi escudo son tus horas,
y tus horas son mi tiempo.
Eres tu sin duda la que me alza en alegrías
que me da la vida entera en un seguir de medicinas
recetadas con mis sueños y que curan nuestros días
y que dan sincero aliento a este festejo
que enternece en el recuerdo de el amor certero.
Dame bella mía otro recuerdo más,
pues los años pasan y tu sigues siendo
la dulce estrella que ilumina el cielo de mi despertar.
Sera de este tosco caballero
una lucha épica
la de intentar decir tu nombre,
la de intentar cabalgar el cielo
que amanece en tu sonrisa,
que desgarra un sin fin de expectativas.
Es el futuro,
mira con mis ojos lo que yo no sueño,
que es la grandeza de tu alma
y la riqueza de tu empeño.
majaderías de un sastre sin telar,
es el abono que preludia el fértil
jardín del bienestar.
No soy de hielo, tengo secuelas del invierno,
parece que me invaden los deseos,
y veo el camino de baldosas amarillas
en tu perfecta imperfección,
y pienso que si no encuentro tus ojos,
seré ciego, si no alcanzo tu sonrisa,
desgraciado seré mi amor
si tu corazón no veo.
Paladio firme de tu estirpe esgrimes,
mentoladas dudas que me escollan
el intento de acabar ileso,
pero mi cota de mallas son tus serenos besos,
y mi escudo son tus horas,
y tus horas son mi tiempo.
Eres tu sin duda la que me alza en alegrías
que me da la vida entera en un seguir de medicinas
recetadas con mis sueños y que curan nuestros días
y que dan sincero aliento a este festejo
que enternece en el recuerdo de el amor certero.
Dame bella mía otro recuerdo más,
pues los años pasan y tu sigues siendo
la dulce estrella que ilumina el cielo de mi despertar.
Sera de este tosco caballero
una lucha épica
la de intentar decir tu nombre,
la de intentar cabalgar el cielo
que amanece en tu sonrisa,
que desgarra un sin fin de expectativas.
Es el futuro,
mira con mis ojos lo que yo no sueño,
que es la grandeza de tu alma
y la riqueza de tu empeño.