
A él le contaba de ti.
Ayer lentamente paseando junto a él,
Le susurraba con tierna complicidad,
De tu sonrisa de niño, en tu boca sensual,
Invitando al beso pleno de ardiente pasión.
Mientras de él recibía tibias caricias,
Le contaba de tus manos el suave roce,
Que en mi piel dibujaría líneas ardientes,
Anhelo aun pospuesto del ansiado goce.
Escuchando el cálido sonido de su voz,
Contándole estoy como desea el alma mía,
Oír de ti palabras llenas de ternura y amor,
Adornadas con los brillos de tu risa cantarina.
Mientras me muestra su fuerza y poder,
Le digo del ansia por el cuerpo amado,
Como sumergirme quisiera en una sima,
Fundidos uno en otro cual ardiente metal.
Caminando junto mi amante, el mar,
Mientras el jugaba a besar mis pies,
Contemplando de el su fuerza y poder,
Ayer amado mío, de ti le hablaba a él.