Pobrecilla torcaza
encogida en terraza
hay señal que amenaza
la lluvia en lontananza.
Poco ágil y cansada
mira hacia la calzada.
Triste, sola y callada,
se ve apesadumbrada.
Ni el vuelo se le antoja
cuando la lluvia moja;
el viento la despoja
sobre la teja roja.
Mas, la hallé esta mañana
ufana en mi ventana.
Su pluma tan lozana
cual bella soberana.
© Estela Foderé ®