
Venero cada espacio de nuestro encuentro,
Suave caricia, mágica mirada, sutiles labios que me estremecen.
Tus manos ardientes me comprenden y latentemente me sumergen,
A un mundo diferente, anhelos que tu corazón guardaba; ¡Secretos que
había en tu alma, fantasías que deseabas! ¡Hoy todas son mías, solo mías!
Escribo sobre ti con ensueño, entendiendo los sueños que me perseguían,
Tu mirada y la mía sé buscan dejando suspiros y marcas, huellas que suben
y se acompañan a la esfera del sufrimiento, a los deseos de volar lejos.
Y en el espacio de cada célula, Lejos… Lejos… en la distancia,
Un silente grito se ahoga dentro, Buscando a prisa ese gran encuentro,
igual o mejor donde latentemente una vez sobre tu lecho y con muchas
ansias tu me esperabas para dejar tu alma sobre mi pecho.
Cuanta dulzura me abrazo, me volqué en tus brazos sin condición, te pedí
Amablemente no te vayas, quédate en mí y persistamos; Tratemos de olvidar
lo pasado, vivamos nuestro idilio con esta magia, bebiendo cada uno de
nuestros encuentros; ¡Recordándote hoy amor, Te venero!
A.B.V. © Gaviota Del Alba 4.3.10