Christ querido:
Si de entrenamiento animal se trata, yo soy experta en ello, mira te cuento:
Hace algunos años, empecé a recolectar mascotas en casa, tenía 3 perros, un pastor aleman, un dobbermann y una perrita pequinesa muy querendona, salamera y muy cotorrona, pues nunca paraba de ladrar, si hacía frío, lloraba, si hacía calor, saltaba y brincaba y se acababa las mangueras de mi jardín a mordidas, si no hacía frío ni calor, siempre quería salir a pasear, puf, el caso es que siempre tenía guerra con ella y me contaminaba a la jauría.
Luego me regalaron un pollito al cual le puse por nombre "QUIQUE", y el condenado quique era un comensal exigente, se comía a sus ancestros, jajajaja pura carne de pollo le gustaba, ah... pero como yo lo consideré un sacrilegio, le empecè a dar bolas de las perros, jajaja o sea, alimento purina de ese que venden el bolsas y por kilos (alimento para perros), bueno pues al raton el quique se puso como pavorreal de hermoso con tantas bolitas que se echaba al buche y se puso más cantador, ese me despertaba no sólo en la madrugada sino a todas las horas del dìa, ya no supe còmo pararlo y sigue cantando a toda garganta las rancheras.
Después me regalaron un periquito catalino, estaba tan hermoso que yo lo consentía demasiado, le enseñé a hablar, luego ya me arremedaba hasta mis estornudos el méndigo, a todas horas nos estaba gritando: "Doral... se te queman los frijoles", "Doral, abre la puerta están tocando", "Doral, ya llevas mucho tiempo en el baño" jajaja, de todo se daba cuenta el méndigo perico, y terminó ahogandose solito en el cantarito de agua que le puse dentro de su jaula, creo que me faltó enseñarle a nadar, jajaja.
Más tarde compré tres tortugas, éstas sí que han acabado con toda mi paciencia, pues éstas no comen.... ¡Tragan!, y ya estoy hasta buscando ofertas de comidas para tortugas, porque no me son suficientes las salchichas de mi refrigerador, se las devoran, les encantan los plátanos, el jitomate, la lechuga, el migajón de pan, etc. y cuando se me escapan de la pecera, las veo comer hasta insectos, jajaja es increíble, ya no puedo más.
Bueno, para no alargar más mi historia de la conducta animal, te diré mi Christ, que todos los métodos de entrenamiento me han fallado, pues ni los perros, ni pollo, ni el perico, ni las tortugas ni el marido se han corregido, jajajaja pero no he probado el de las papas fritas, jajajaja creo que un día de éstos tendré que experimentar.
Buen provecho con este desayunito que les comparto.
¡Que tengan un lindo día!
Doral.