Lluvia
cuando la lluvia golpee tú ventana.
Que en esa tarde de amor también llovía
y en ese recuerdo presente yo te amaba.
Es triste ocultar el recuerdo,
en ese instante de la inmensidad.
Cuando todo lo cubre el silencio,
entre la nostalgia y la soledad.
Creí amarte y lo tenía todo.
Todo lo tenía y lo perdí.
Y en este desamparo me encuentro sólo,
abrazado a la penumbra que vive en mí.
Soy incapaz de sentir que puedo olvidarte
y se que el olvido todo lo puede.
Porque en la tarde empiezo a extrañarte,
cada vez que en mis ojos llueve.
Y en esa tarde de amor que también llovía.
Junto a tú ventana empañada de pasión.
Hoy es una tarde de lluvia y melancolía,
pero de lágrimas de mi corazón.
PENUMBRO