
Vi al Rey a lo lejos,
Realizándo un sólo movimiento,
Haciéndose eterno nuestro encuentro.
En mi mente vino un rumor,
Ataqué a ese temor,
Con recuerdos de nuestro amor.
Pero mi soledad es mala consejera,
Se disfraza de pasajera,
Haciéndo que mi corazón se partiera.
Sabía como juntarlo otra vez,
Pero al no encontrar tu calidez,
La Reina te hizo jaque mate en el ajedrez.
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