En este gran desfile todas duermen
El mundo es un gran poso, hondo hondo.
Y tu amor tan lejano,
y yo tan solo...
En el azul del cielo, no hay perfume,
solo un distanciamiento, tan
profundo,
y un colorido húmedo
he invisible.
Bien pudiera recolectar imágenes,
cuando la tarde juega con mis ojos.
-Era Braulia de hermosa cabellera,
el viento asido al pelo, y su mirada vaga.
-Atrás de los becerros bramadores
-Carolina con pasos presurosos
aleja de las vacas y corrales
la manada pequeña de terneros...
-Es Marta la que llega
con libros bajo el brazo,
y en su mirada amplia,
un montón de sonrisas.
-Con lentitud y gracia,
Teresa va soñando,
al compás del replique,
de las viejas campanas.
-Thelma canta en mi oído,
luego desaparece como el humo,
elevada en mis sueños fantasiosos.
En este gran desfile todas duermen,
en el tren vaporoso de mi mente...
Solo tu te estacionas
en mi cuerpo,
como una primavera fija,
soltando tus luces y tus sombras,
todas llenas de amor imaginario...
Oh María, si no te hubieras ido aquella tarde,
yo viviría feliz en este mundo;
hondo hondo, y lleno de tristeza.
Germán g