He conseguido matar mi soledad trayendo a mi cada uno de tus recuerdos, haciendo estallar mis noches en los hondos quejidos de mis lamentos, estando de éste nuestro Adiós en desacuerdo, pues todavía es todo tuyo mi amor y mis pensamientos.
Llevo ya muchos días extrañándote, recorro media ciudad buscando la casualidad de encontrarte, mirarte a los ojos… brincando mi corazón en son de apachurrarte, haciendo de mí un despojo, enervando mi antojo y haciendo de mis sentimientos tu mayor descarte.
He convertido la noche triste y oscura, en un cielo lleno de estrellas fugaces, amor y felicidad, al convertirte en mi luna por ser tú mi más linda realidad, conjugando tú desprecio con este corazón enamorado… ¡Qué Locura!
Extraño el delicioso sabor de tus besos, la pasión de tu cuerpo por amarme, extraño la mirada coqueta por conquistarme;
haciéndome completamente tuyo, embrujándome hasta los huesos.
Cometí el error más absurdo, tonto e inefable, mi niño inmaduro actúo sobre todas las cosas, ocasionado que te refugiaras en personas de trato más amable y ahora sufro por estar perdiendo a la niña más hermosa.
Ahora en mis sueños deseo ir al cielo, conversar con Dios para suplicarle me deje a tu lado, pues ahora ya he recapacitado… perdóname chiquita, y regálame de tus manos el más tierno consuelo.
He de mirarte siempre a los ojos, pues me inspiran ternura y bondad, he de llevarte en mis oraciones a mi Dios para que te proteja y te cuide mi amor, he de inspirarme en la magia de tus besos, en tu cuerpo y su calor; y he decirte mi niña sueño contigo en mis noches de fantasía, por ser tú mi felicidad.
Recuerda que entre tus manos soy dueño del mundo y de la inspiración...Te Amo mi amor y anhelo volver a tu lado...Te necesito mucho
